¿Qué compromiso adquieres con el arte y para quién lo adquieres?
El compromiso lo adquiero conmigo misma. El arte ha pasado a ser una terapia en mi vida. Puede que alguien se sienta representada/o al ver mi obra, puede que no; puede que sientan algo, o puede que les sea completamente indiferente. Mi objetivo no es vender, es comunicarme con otras personas usando el lenguaje con el que mejor me expreso.
¿Qué pasos quedan por andar en el mundo del arte para que la mujer alcance su posición? Comparado o no con otros contextos
Muchos. Desde el propio aprendizaje. Nos dejan fuera. No existimos. Incluso en los estudios más básicos de Historia del Arte es raro, y casi anecdótico, encontrar a mujeres artistas. No porque no hayan existido, si no porque las ignoran y les aplican el don de la casualidad. Algo así como “pasaba por aquí y se me ocurrió pintar un cuadro, pero no soy artista”.
¿Cuál es tu opinión acerca de la situación actual de la mujer en el arte?
La mujer cada vez se va abriendo más camino dentro del arte, pero está costando mucho. Mientras el hombre habla, la mujer debe gritar para que se le escucha la mitad. Y cuando lo hace, siempre se le asocia un pequeño matiz de “intenta llamar la atención”. Ofende, porque tras tanto recorrido en el arte contemporáneo, con tantas vanguardias, y tantos artistas que en su momento hicieron lo que se podrían tomar por locuras, es a ellos a los que se sigue considerando genios, y es a ellas a las que se les sigue considerando locas que quieren quince minutos de fama.
¿Has renunciado a algo por ser mujer y artista? ¿Hasta dónde estás dispuesta a hacerlo?
He de confesar que sí, he renunciado a algunas cosas, entre ellas a algunas personas. No sé hasta dónde estoy dispuesta a renunciar a algo por ser artista, pero sí sé hasta dónde estoy dispuesta a renunciar por ser mujer.
¿Consideras que este tipo de proyectos solo para mujeres artistas tiene su razón de ser hoy en día ¿ Le dirías algo a aquellos/as que ironizan sobre estos programas?
Por supuesto. No sólo creo que proyectos como éste tengan razón de ser, es que pienso que son estrictamente necesarios. Actualmente en España el 70% de los estudiantes de arte son mujeres, pero, por poner un ejemplo, en la feria ARCO del pasado año, sólo un 4% de los artistas eran mujeres. Eso deja bastante claro que seguimos dando prioridad a lo que dice y crea un hombre. Sin proyectos como éste sería aún más complicado entrar en circuito, y mucho más aún que se nos escuchara.
Creo que las personas que ironizan o reniegan de la utilidad de este tipo de eventos lo hacen desde una posición privilegiada. Una mayoría privilegiada que es reacia a hacerse elegantemente a un lado para que los trozos del pastel empiecen a cortarse en trozos iguales.